La diabetes tipo 2 no aparece de un día para otro, y tampoco se revierte de la noche a la mañana. En mi caso, fue una combinación de decisiones pequeñas pero consistentes las que me permitieron transformar mi salud.

Hoy quiero compartir contigo los 7 hábitos diarios que me ayudaron a revertir la diabetes tipo 2 naturalmente, sin pastillas nuevas ni dietas extremas.


1. Tomar Unimate en la mañana (en lugar de café)

Uno de los cambios más importantes fue comenzar mi día con Unimate, un té de yerba mate concentrado. Lo tomo en tragos desde que me levanto hasta después de mi primera comida. A diferencia del café, me da energía sin ponerme ansioso, y además me ayuda a controlar el apetito. Sentí más enfoque, menos antojos y mejor digestión.


2. Tomar Balance antes de la cena

Balance es una fibra inteligente que tomo 5 a 10 minutos antes de la cena. Esta fibra ayuda a regular los niveles de glucosa en sangre después de comer. Además, me ayudó con la digestión, a reducir inflamación y a evitar picos de azúcar. Es un pilar en el sistema Siéntete Genial que sigo todos los días.


3. Comer de forma consciente, no perfecta

No hice dietas locas ni conté calorías. Aprendí a combinar mejor mis alimentos: más fibra, más proteína, menos azúcares ocultos. Dejé de comer por ansiedad y empecé a escuchar mi cuerpo. No se trata de dejar el pan o el arroz, sino de saber cuándo y cómo comerlos.


4. Caminar 20 a 30 minutos al día

Antes pensaba que para mejorar mi salud tenía que ir al gimnasio dos horas al día. Pero aprendí que una simple caminata diaria, después de comer, puede ayudar a regular la glucosa. Caminar me relajaba, bajaba mi estrés y mejoraba mi circulación. Y lo más importante: era algo que podía hacer todos los días, sin excusas.


5. Dormir bien (y sin celular en la noche)

Durante años subestimé el sueño. Me dormía tarde, con el teléfono en la mano, y me levantaba cansado. Hoy priorizo dormir 7 a 8 horas y alejarme del celular al menos 1 hora antes de acostarme. Dormir bien estabilizó mis niveles de cortisol y mejoró mi sensibilidad a la insulina.


6. Medir mi glucosa en la mañana y anotar

Este hábito fue clave. Cada mañana, antes de desayunar, mido mi glucosa y la anoto. Eso me permite ver qué funciona y qué no. Ver mi progreso día a día me motivó a seguir. Pasé de amanecer en 250 a tener lecturas entre 85 y 95 mg/dL de forma constante.


7. Ser paciente y constante

No todo cambió de la noche a la mañana. Hubo días buenos y días no tan buenos. Pero lo importante fue la constancia. Estos hábitos no solo mejoraron mi glucosa, también ayudaron con mi colesterol, presión arterial e incluso mi hígado graso. Revertir la diabetes naturalmente es posible, pero requiere compromiso.


💬 Mi mensaje para ti

Si estás luchando con la diabetes tipo 2, quiero decirte que no estás solo. Y que sí se puede.
Estos 7 hábitos cambiaron mi vida, y hoy los comparto con la esperanza de que te sirvan a ti también.
No necesitas hacer todo perfecto, solo empezar y ser constante.

Visita 👉 comorevertirladiabetes.com para más consejos, artículos y mi historia completa con el sistema Siéntete Genial.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *